¿Tu hijo es miope? ¡Esto te interesa!
Se calcula que en el 2050 la mitad de la población mundial será miope. ¡Tenemos que luchar juntos para evitarlo!
Desde Óptica Ollos llevamos tiempo trasmitiendo nuestra preocupación por esta pandemia y por tratar a los niños junto con la ayuda de los padres, educadores y sanitarios. Para controlar la miopía es fundamental atajarla cuando está comenzando y por ese motivo, es necesario tomar acción cuanto antes. Y el mayor riesgo aparece cuando surge la miopía en niños pequeños.
Además, a menor edad de aparición las posibilidades de progresión son mayores. A partir de -5.50 dioptrías la miopía se comienza a considerar como patológica, ya que aumentan los riesgos de padecer las enfermedades oculares, como el desprendimiento de retina y otras patologías. Por ese motivo, resulta clave realizar controles anuales en niños por parte del optometrista u el oftalmólogo para detectar la miopía tan pronto aparece (o incluso antes).
Existen diferentes tipos de tratamientos para la miopía:
No dejes que la miopía crezca.
¡Stop a la miopía!
Realizar más actividades al aire libre
Pasar más tiempo al aire libre reduce el riesgo de desarrollar miopía y la evidencia científica en este punto es incuestionable.
Si tienes hijos y consigues que jueguen fuera de casa una media de dos horas al día, el riesgo de desarrollar miopía se reduce al 20%. Así lo revela el estudio CLEERE realizado en la Universidad Estatal de Ohio durante 10 años con más de 1200 niños, 633 miopes y 617 no. Hay otros estudios realizados en Australia o en Asia que confirman que los niños que están al aire libre en el periodo de recreo sin usar teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos, les aumenta menos la miopía
Y también hay evidencia científica de que aumenta menos la miopía en verano que en invierno. En este caso es un estudio realizado en Dinamarca.
Pero… ¿Por qué aumenta menos la miopía al estar más tiempo al aire libre? No se sabe con 100% de seguridad, pero parece existir una relación directa con la exposición a la luz del sol pues esta luz estimula la producción de dopamina dentro del ojo a través de las células amacrinas de la retina. Y esta dopamina puede tener una función de bloqueo de la señal de alargamiento del ojo durante su desarrollo.
Pero hay más factores que pueden influir como son que cuando estamos en exteriores realizamos menos esfuerzo de acomodación ya que solemos mirar a distancias más lejanas. Además, durante ese tiempo lo habitual es que realicemos menos actividades de visión próxima.
Llevar la graduación completa todo el día
Llevar la corrección completa y constante de la miopía tanto para visión de lejos como de cerca (aunque se consiga una buena visión sin gafas en distancias cortas o intermedias).
Durante años pensábamos que llevar la graduación por lo bajo o incluso prescindir de ella cuando la miopía era de un grado muy bajo, era una buena alternativa pero la evidencia científica ha demostrado justamente lo contrario. Esto supone que es necesario llevar siempre la graduación bien ajustada (más en los niños pequeños) por lo que es preciso hacer revisiones frecuentes.
Si tienes miopía debes de llevar la corrección correcta durante todo el día aunque veas bien de cerca sin gafas y/o lentillas.
Distancia e iluminación adecuadas
Cuanto más corta sea la distancia de la tarea que realizamos, más problemática será para la vista. Evita en lo posible ver videos o jugar en el móvil y cuando lo hagas trata de hacerlo a través de un monitor o mejor aún en una televisión.
Utilizar una iluminación adecuada es importante. No estés a oscuras viendo la tele o el móvil. Y si cuando vas a estar con la tablet y/o el móvil puedes hacerlo al aire libre mucho mejor.
Evita en lo posible realizar tareas a distancias muy cortas (móvil) y con mala iluminación.
Descansos periódicos para enfocar a lo lejos
Si cuando estás haciendo actividades continuadas de visión de cerca pasas mucho tiempo seguido sin enfocar de lejos, es más probable que te pueda aumentar la miopía. A menor distancia (móviles), mayor es el riesgo de problemas visuales.
Por eso es importante realizar paradas cortas cada 20-30 minutos y que durante 20-30 segundos enfoques un objeto a una distancia de seis metros (20 pies) o más. Esta recomendación tiene el nombre de «Regla 20-20-20».
Cuando se usa esta regla, se debe enfocar de lejos un estímulo pequeño a la mayor distancia que te lo permita (matrícula de un coche aparcado, cartel, etc.). No dejes tu vista relajada y desenfocada.
El riesgo de aumento de miopía está más relacionado con la falta de cambio de enfoque de cerca a lejos que con el número de horas que pasamos realizando actividades de visión cerca.
Lentillas blandas
Estas lentes de contacto están basadas en el principio del desenfoque periférico (al igual que las de orto-k y las gafas para miopía).
Son lentes de materiales similares a las lentillas blandas normales pero con diseños especiales que logran un efecto de desenfoque periférico. Existen diversas alternativas que cuentan con evidencia científica, aunque es preciso seguir aumentando el número de estudios y de casos.
Lentes especiales de desenfoque periférico
Este es un sistema muy simple y eficaz que a diferencia de otros métodos no requiere usar lentes de contacto ni gotas. Tienen una eficacia en la reducción de la progresión de la miopía de entre un 40% a más del 60% (en función del tipo de lente) según la evidencia científica actual (estudio 1 y estudio 2).
Control farmatológico con gotas de atropina
Esta es otra alternativa de tratamiento que también tiene una buena evidencia científica. Es una opción válida y simple que requiere supervisión por parte de un oftalmólogo pero que no consigue unos resultados tan buenos como el uso de lentillas especiales o gafas para control de miopía.
Puede producir efectos secundarios aunque no suele dar problemas.
Tratamientos de miopía combinados
Es posible combinar tratamientos y de hecho es muy recomendable. Lo que hay que tener en cuenta es lo siguiente:
- Tienen un efecto sinérgico pero no se suma el efecto de modo algebraico.
- Los consejos de ergonomía y de hábitos saludables (tratamientos pasivos) se deberían de recomendar siempre junto con cualquier otro tratamiento activo.
- En casos con peor pronóstico (por ejemplo un niño pequeño al que la miopía le avanza muy rápido), se pueden combinar gotas de atropina con un tratamiento óptico.
- Sobre los tratamientos combinados no hay todavía una evidencia robusta y es preciso esperar a conocer resultados de nuevos estudios para saber exactamente las mejores combinaciones y resultados.
Lentillas de ortoqueratología u orto-k
Estas lentes de contacto rígidas permeables al gas (de uso nocturno) son una buena opción de control de miopía en niños y existen múltiples estudios con alta evidencia científica que así lo avalan.
No sólo ayudan a frenar el aumento de miopía sino que también hay usuarios que prefieren usar este sistema en lugar de utilizar lentillas durante el día (aunque ya no les aumente la graduación).
Con esta alternativa de tratamiento de la miopía está demostrado que se puede conseguir que la miopía suba entre un 40% y un 50% menos que si se usan gafas o lentillas sin ser de control de miopía.